¿Como sigue el Mercosur?

Mercosur El ABC 03.07.15

Los resquemores entre los socios, la caída del intercambio comercial intrabloque, las trabas comerciales y las dificultades económicas reavivaron el debate sobre el futuro del proyecto

En medio de acusaciones entre los socios por el incumplimiento de lo establecido en el Tratado de Asunción y con los números comerciales en rojo , reflotaron las teorías sobre las ventajas de flexibilizar ciertas reglas -como que cada país pueda firmar acuerdos con terceros sin la anuencia del resto- y cuestionamientos respecto de la utilidad del bloque para algunos de sus integrantes.

«Coincidimos en que el Mercosur representa un importante patrimonio común. Como dice el presidente Tabaré Vázquez: el Mercosur siempre tiene que adaptarse a las nuevas circunstancias», comentó Dilma Rousseff el mes pasado, cuando recibió a su par uruguayo en Brasilia. » Pero no seríamos sinceros si dijéramos que el Mercosur, tal como está, nos satisface», había dicho antes Vázquez.

La semana pasada, mientras en Montevideo Tabaré reclamaba al unísono con su colega de Paraguay, Horacio Cartés, la eliminación de barreras no arancelarias en el bloque, Rousseff anunciaba un ambicioso plan para estimular las golpeadas exportaciones brasileñas que incluye entre sus principales objetivos la firma del demorado acuerdo comercial del Mercosur con la Unión Europea.

Asoman nuevamente teorías como la de «las dos velocidades» (una negociación por países, no en bloque, pero manteniendo el paraguas del Mercosur) y posturas más extremas que proponen que «cada uno se corte solo». ¿Es necesario redefinir los objetivos del Mercosur?

Félix Peña expresa «Los objetivos de asegurar un ambiente de democracia, paz y estabilidad política entre naciones vecinas, siguen siendo válidos. La metodología empleada no siempre ha dado los resultados esperados y es lo que ahora deberíamos adaptar a nuevas realidades globales y regionales. En una perspectiva argentina sigo visualizando al Mercosur como una idea valiosa.

Desde Paraguay, Fernando Masi, presidente del Centro de Análisis y Difusión de la Economía Paraguaya (Cadep) confiesa que no tiene muchas esperanzas de que «el bloque siga hacia un estadio de unión aduanera y, por lo tanto, tampoco hacia el mercado común porque se ha visto muy poco de voluntad en cuanto a políticas comunitarias».

» Tenemos que conseguir consensos para ciertas cuestiones comunitarias beneficiosas para todos. Hay que ir profundizando más todo lo que tiene que ver con las trabas paraarancelarias en el Mercosur y con la falta de armonización de normas técnicas. Si se observan otros acuerdos de libre comercio como el Nafta o el Cafta se comprueba que han progresado mucho más que el Mercosur en este tipo de cosas, sino en la armonización de las políticas que hacen al comercio.», dijo Masi.

¿Cómo define el estado actual del Mercosur? «No creo que esté yendo hacia su desaparición. Llegamos a una zona de libre comercio, dimos pasos mucho más adelantados de lo que fue la experiencia de Aladi. Lo que hay que preservar son los activos que construimos dentro del Mercosur y ser realistas. Si no podemos ir hasta la unión aduanera entonces tratemos de profundizar lo que tenemos, ya que no solo es beneficio para el Mercosur sino para toda América del Sur «, sostuvo Masi.

Nuevos contextos

Esteban Actis, profesor de la Universidad Nacional de Rosario, considera que el problema que tiene el Mercosur es que «se diseñó bajo un espíritu de época que se fue desvaneciendo con el paso del tiempo» y que promediando la segunda década del siglo XXI no sólo no resolvió sus temas pendientes sino que los mismos se profundizaron en un nuevo contexto regional.

«El estancamiento de las economías -principalmente la de Brasil y Argentina- generó mayor administración del comercio (más trabas en frontera) e indefectiblemente una profunda caída en los intercambios interbloque. La nueva idea que parece estructurar la noción de integración es la de regionalismos del siglo XXI encarnizada en la Alianza del Pacifico, un proyecto de integración pensado en una nueva liberalización económica bajo la inserción en las cadenas globales de valor, estructuradas en megaacuerdos comerciales como la Asociación Trasatlántica de Comercio e Inversión (TTIP) y el Acuerdo de Asociación Transpacífico (TTP)», explica Actis.

“Desde Brasilia se ha dejado de pensar que un Mercosur fuerte es un prerrequisito indispensable para convertirse en un jugador global», arriesga.

Desde Brasil, Welber Barral defendió la importancia del bloque para su país.

En un artículo de opinión publicado por El País, el ex secretario de Comercio Exterior (2007-2011), admitió los «defectos del Mercosur»: una clara falta de coordinación macroeconómica , fallas institucionales de los países a raíz de sus sistemas presidenciales centralizados y la falta de voluntad política para avanzar en las instituciones regionales, entre otras cuestiones. «La integración industrial en la región se retrasó debido a las medidas unilaterales y proteccionistas. La fluctuación de las políticas económicas nacionales frena la integración regional y produce resultados decepcionantes», agregó.

Enemigo interno

Barral asegura que los principales oponentes en las negociaciones anteriores fueron «los sectores no competitivos de la industria brasileña y no los socios del Mercosur», y recordó ejemplos en los que aún actuando solo, Brasil no logró acuerdos sustantivos, como en el caso de México.

Según opina, el gran obstáculo para que el Mercosur firme tratados de libre comercio no es la posible antipatía entre sus presidentes sino la competitividad de su agricultura. «En el mundo, la agricultura es el sector más protegido con aranceles muy elevados y barreras sanitarias». Por ser muy competitivos en el rubro, los países del Mercosur son una amenaza visible.

«Es irreal creer que Brasil, libre del Mercosur, podría lograr acuerdos de libre comercio más rápido. Por supuesto, la coordinación en el Mercosur requiere tiempo y sensibilidad a las demandas de nuestros vecinos, pero hay soluciones técnicas que respondan a las demandas particulares (como cuando se elaboró una lista separada para la Argentina en el acuerdo Mercosur-Israel).

Dante Sica, director de abeceb.com, opina que «el bloque sobrevive porque es mucho más que un tema comercial: el Mercosur es un programa de integración territorial, cultural, social y política que va más allá de los temas meramente de comercio e inversiones», dice.

Por eso, confía en que «es una realidad y va a permanecer», pero admite que al mismo tiempo «es claro que hay que hacer un sinceramiento» para replantear las relaciones económicas y la posibilidad de seguir avanzando.

«Hay una discusión que se viene, pero los tres países -Uruguay estaba mucho más apurado, Brasil ha puesto un poco el freno-, esperarán a que venga la nueva administración (en la Argentina tras las elecciones presidenciales).

¿Puede sobrevivir el Mercosur tal como está hoy? «Desde el punto de vista económico y comercial es difícil que podamos seguir manteniendo este statu quo porque lo que pasó en los últimos 10 años es nada, y en esa nada hay sectores que se ven netamente perjudicados, a los que el Mercosur no les está dando los beneficios que les prometía al inicio de los 90, cuando se creó».

 

Por Florencia Carbone  | LA NACION

http://www.lanacion.com.ar/1806024-metamorfosis-para-la-supervivencia

 

El peor momento del Mercosur

En 2014, las exportaciones del Mercosur cayeron 9,6%. Según datos del BID, las exportaciones del bloque cayeron 9,6% en 2014. El primer lugar del podio es para China (-13,5%). Pero también disminuyeron hacia el resto de Asia (-8%), la UE (-9,6%), el resto de América latina (-8,7%) y Estados Unidos (-4,8%).

El informe de la consultora DNI destaca especialmente las reducciones del comercio intrarregión (-13,1%). «La caída del comercio del Mercosur muestra el peor resultado de un bloque en la región. En 2014 las exportaciones de México crecieron 4,6%, y las de Centroamérica y el Caribe 2,3.”

Marcelo Elizondo cree que el panorama actual plantea la oportunidad de «revisar el bloque mirando al futuro». Luego de detallar las declaraciones de representantes de Brasil y Uruguay pidiendo que el Mercosur «se adapte a las nuevas circunstancias» y la intención pública de esos países de avanzar de modo concreto en el acuerdo con la UE, el director de DNI dijo que el bloque se enfrenta a dos problemas principales.  Por un lado, coyuntural referido al pasado reciente. El otro es estructural, referido al futuro inminente.

La revivida negociación por un tratado de libre comercio con la UE puso a Brasil, Uruguay, Paraguay y la Argentina ante la necesidad de definir no ya una propuesta para una negociación con Europa sino una postura estratégica para el futuro institucional del bloque.

Para la Argentina se trata de un momento de relevancia especial: el Mercosur es el principal destino de sus exportaciones. En 2014, la Argentina exportó a todo el bloque US$20.000 millones – 15.000 a Brasil – (de un total de ventas al mundo de casi US$72.000 millones).

Mientras las empresas chilenas acceden a 56 mercados con aranceles reducidos por acuerdos comerciales, los países del Mercosur tienen esa condición sólo con 11 destinos.

 

La tendencia Global Lleva a los Países a Buscar Membresía en Uniones y Pactos Comerciales

El tema es muy importante para nosotros como inversionistas. El conocimiento y seguimiento de estos desarrollos económicos proyectan una potencial idea de un mayor desenvolvimiento de la región.

Mientras que algunos países negocian su inserción en las agrupaciones comerciales globales, otros continúan un camino incierto que ralentiza los entendimientos. Son varios los ejemplos que podemos mencionar respecto a adelantos positivos. Las experiencias de integración de Costa Rica, Colombia y Panamá van en ese camino. Los ejemplos siguen pero no sucede lo mismo con el Mercosur.

Al crearse el Mercosur, en sus inicios, presentaba un optimismo importante que presagiaba constantes avances en la operatoria común de los miembros. Pero, como el vuelo de la perdiz, el vuelo fue bajo y corto.

Brasil y Uruguay desarrollan la teoría de las dos velocidades. Esta surge de la oportunidad económica de ambos países de firmar un acuerdo marco con la Unión Europea. La hipótesis es que de acuerdo a esta interpretación, cada miembro del Mercosur, podría suscribir un programa de desgravación en función de sus propias necesidades.

Brasil y Uruguay están avanzando en un acuerdo bilateral que contempla la integración productiva y de infraestructura entre ambos países y de aquí surge la esperanza de progresar, en forma bilateral en una negociación con la Unión Europea. Mencionemos, que un acuerdo entre Brasil y la Unión Europea sumaria un comercio de u$s 80.000 mil millones, el 27 % del intercambio de Europa con Latino America. Paraguay también esta interesado en algún tipo de acuerdo, y parece que no es el camino elegido por Argentina.

El gobierno brasileño, siempre se preocupo en resaltar su interés en preservar en primer lugar, las negociaciones en bloque. Igual actitud asumieron los europeos. Sin embargo, el Financial Times, publico declaraciones del ministro de Relaciones exteriores de Brasil, Antonio Patriota (en aquel momento), en las que hablo de los fuertes incentivos para avanzar en el acuerdo  pero anticipo “que cada país del Mercosur podría negociar a velocidades diferentes”.

Es posible es firmar un acuerdo macro al que suscriban todos los países del Mercosur y luego, cada uno, avanza con la velocidad que crea conveniente.

Se logro una salida elegante que si bien no es definitiva, ya que requiere la aceptación por parte de la Unión Europea.

Argentina con sus criterios proteccionistas, no esta en condiciones de negociar con la Unión Europea, pero deberá ordenar su economía y entrar en negociaciones de acuerdo al firmado en el acuerdo macro, aunque sea a diferentes velocidades de lo definido por Brasil y Uruguay.

El apuro de Brasil tiene su fundamento. Según el Financial Times, el acuerdo con la Unión Europea se ha vuelto una necesidad urgente para Brasil, ya que fue reclasificado como país de clase media alta y por ello, el próximo año perderá las preferencias comerciales con Europa.

¿Sera otro tren que pierde el Mercosur en general y la Argentina en particular?

 

http://monitorbursatil.com/2014/07/la-globalizacion-lleva-a-los-paises-a-buscar-membresia-en-uniones-y-pactos-comerciales-2/

 

Notas Relacionadas

http://codigoinversor.com/2013/08/latinoamerica-la-region-se-globaliza-la-politica-marca-limites/

http://codigoinversor.com/2013/06/latinoamerica-el-mercosur-criticado-desde-adentro-y-desde-afuera/

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http://codigoinversor.com/2014/08/la-decision-boliviana-y-la-evolucion-del-mercosur/

http://codigoinversor.com/2013/11/la-asfixia-del-mercosur-entre-paralizaciones-e-incumplimientos/

http://codigoinversor.com/2013/06/latinoamerica-mercosur-y-alianza-del-pacifico/

 

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