La mejor manera de participar del plan de infraestructura de Colombia por $ 50 billones
Los concursos de belleza pueden parecer anticuados, pero no se puede negar que ganar el título de Miss Universo abre un montón de oportunidades. Así que cuando una graduada colombiana, Paulina Vega, fue coronada Miss Universo el pasado mes de febrero, esperaba una avalancha de ofertas de trabajo y acuerdos de patrocinio.
Pero incluso ella debe haberse sorprendida al recibir una oferta para un puesto de trabajo para el movimiento guerrillero de Colombia, las Farc. El objetivo de los rebeldes, era que los ayudase en las negociaciones con el gobierno colombiano, en la Habana, Cuba.
En aquel momento dichas conversaciones auguraban la paz. Las Farc, que son increíblemente impopulares en Colombia, comenzaban a cortejar a la opinión pública. Y eso sugeriria que sus líderes estánban buscando por delante a una situación post-acuerdo de paz, cuando la batalla pasaria de la selva a las urnas. Todo parecia que las conversaciones de paz en Colombia estaban haciendo un progreso serio y eso es una gran noticia para uno de nuestros sectores preferidos – la infraestructura colombiana.
“Las guerrillas aparecen donde terminan lo caminos”
La cita anterior es de Antonio Navarro Wolff, un guerrillero convertido en político colombiano. Su punto es que los movimientos guerrilleros prosperan en áreas en las que el Estado tiene poca presencia. Sin embargo, lo contrario también es cierto. Es duro construir caminos en zonas con fuerte presencia guerrillera. Y es por eso que la buena noticia que sale de Cuba – y Colombia – debería ayudar al sector de infraestructuras de transporte. Aparte del truco de Miss Universo, hemos visto más signos concretos de progreso de las Farc. Los delegados en las conversaciones de paz han llegado a acuerdos en tres de los cinco principales puntos de fricción. Los temas espinosos del tráfico de cocaína, el desarrollo rural y la futura participación política para los líderes de las Farc. Por supuesto, es demasiado pronto para celebrar todavía. Se están negociando cómo funcionaría el desarme y la responsabilidad legal de los comandantes de las Farc – pero el progreso hasta ahora es alentador. (Nota de la traducción: En estos días dos hechos ensombrecieron las tratativas, por un lado un ataque de los guerrilleros al Ejercito, y a posteriori, la correspondiente respuesta de del Gobierno de Colombia).
Una encuesta reciente muestra que la mayoría de los colombianos creen que ahora estas conversaciones podrían dar resultados positivos. Teniendo en cuenta todos los falsos amaneceres, que han visto en el último medio siglo la esperanza esta vez es significativa. Una de las razones por la que hay tanta esperanza es que ya estamos viendo cambios en el terreno. Inicialmente se le negó la petición de las Farc para un alto el fuego. Eso es porque en las conversaciones previas a los rebeldes han utilizado estos altos el fuego para rearmarse y reagruparse. Pero a pesar del rechazo, las Farc ha decidido poner en marcha un alto el fuego unilateral. Después de esperar a ver si era genuino, el gobierno ha respondido deteniendo los bombardeos aéreos contra la guerrilla. Otro desarrollo interesante fue marcado por The Economist, que señala que las Farc ha comenzado a trabajar con el ejército colombiano para despejar las minas terrestres.
Necesidad de infraestructura Los lectores del New World saben que el tema de la infraestructura de Colombia es uno de mis temas favoritos, comencé a escribir en 2012. El país cuenta con una terrible red de infraestructura de transporte. Ya es bastante mala en ciudades como Bogotá, que esta congestionada y no tienen metro ni sistema ferroviario urbano, pero es aún peor cuando se trata de viajar entre ciudades. Colombia es un país enorme – aproximadamente del tamaño de Francia y España juntas – y está formada por sierras altas, vastas extensiones de selva y tramos costeros largos que le dan acceso tanto al Atlántico y el Pacífico. No hay duda que es una geografía difícil, pero otros países de la región, como Chile y, más recientemente, Ecuador, han realizado grandes inversiones en la infraestructura necesaria para atravesar condiciones difíciles. Sin embargo, en Colombia, la gente sigue obligada a utilizar carreteras de mala calidad, con un solo carril. Viajar al interior del país es un calvario arduo y largo.
De hecho la pobre infraestructura de transporte de Colombia está impidiendo el crecimiento económico del país, ya que golpea la productividad al disminuir el flujo de personas y mercancías. Y es por eso que el actual gobierno está decidido a solucionar el problema. ¿Cómo podemos participar de esta inversión? En 2013, estuve un mes en Colombia, entrevistando a figuras líderes del sector público y privado para elaborar un informe sobre el sector de la infraestructura del país. Uno de los encuentros más interesantes fue con Luis Andrade, Jefe de la Agencia Nacional de Infraestructura de Colombia (ANI es su sigla en español). Andrade estaba bajo mucha presión debido a que la ingeniería financiera necesaria para concesionar la carretera, ferrocarril y puerto de programa se movía más lento de lo esperado. Desacuerdos con grupos ambientalistas y comunidades locales fueron retrasando los esfuerzos sobre el terreno. Pero en aquel entonces Andrade se mostró desafiante, con la promesa de que el tema podía avanzar. Ahora, 18 meses después, parece lentamente darle la razón. Tema importante: la cantidad de carreteras en construcción. Cuando entrevisté a Andrade, esperaba 300km de nueva carretera de cuatro carriles en 2014, pero en realidad fueron 212 kilometros. Eso es por debajo del objetivo, pero aún asi, casi cuatro veces más que el promedio de la década anterior a este gobierno.
El logro mas importante es que ha podido otorgar el primer paquete de concesiones para su programa de “cuarta generación” por$ 25billion. El primer paquete de 10 proyectos de carreteras es por un valor aproximado de $ 4.3billion , que es la mayor concesión de la historia de Colombia. El siguiente paquete, por valor de $ 5.9billion, ya está a licitación y se espera que se concederá por el final del segundo trimestre. Una de las mayores dudas sobre el programa de infraestructura fue la capacidad del gobierno colombiano para ejecutarlo. Hasta el momento, estas señales tempranas han sido alentadores. Este programa de $ 25billion es sólo el comienzo. En total, se estima que Colombia tendrá que invertir un total de $ 50billion en su infraestructura durante la próxima década. Eso es una gran inversión para una economía de $ 400billion. La mayor parte del trabajo pesado vendrá del sector privado, donde los grupos locales e internacionales ya han estado trabajando en la obtención del dinero. La británica de inversores en mercados emergentes, Ashmore Group, busca recaudar $ 1 mil millones para dos fondos de infraestructuras colombianas. Dado que los proyectos están en línea, más opciones se abrirán para los inversores. Por ejemplo, Goldman Sachs está planeando vender bonos en los mercados internacionales que serán respaldados por los ingresos futuros de los peajes de autopista.
Pero por ahora, mi forma favorita para invertir es el banco local que cotiza en Estados Unidos, Bancolombia (NYSE: CIB). El banco está involucrado en la financiación de la infraestructura a través de muchos niveles. Por ejemplo, supervisó la salida a bolsa de Cóndor, una empresa de construcción local, mientras que también participa directamente en la infraestructura de transporte. El banco proporcionó recientemente cartas de crédito para los solicitantes del programa 4G y está planeando seguir participando de este tipo de proyectos. José Acosta, director financiero del banco, dijo a Bloomberg «También estamos dispuestos a financiar una parte de la construcción de los proyectos que se iniciarán en los próximos años.» Esto no es sólo una promesa vacía – el banco ya ha comenzado a desarrollar un mercado de dinero a largo plazo en moneda local. Por otra parte, como el banco más grande de Colombia, sus otras divisiones deberían beneficiarse con la recuperación del crecimiento económico. Bancos bien administradas en sistemas financieros bien regulados, a menudo actúan como los fondos negociados en bolsa, para su amplia gama de actividades empresariales. Este programa de infraestructura impulsará el crecimiento de Colombia en los próximos años, ayudando a compensar la caída del precio del petróleo.
James McKeigue The New World